Juan 17:21 y 15:7- La unión con Jesús por permanecer en su palabra
¡Que Dios les bendiga, hermanos! En Juan 17:21, Jesús ora por sus discípulos futuros y pide: “Para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros.” Jesús pide por una unidad entre nosotros, su Padre y sí mismo, no una unidad de esencia sino de obra o función. Y de acuerdo con esta unidad, nos mandó en Juan 15:4 que permaneciéramos en él, y él en nosotros. ¿Y cómo permaneceremos en él? Nos dice en Juan 15:7: “Si permanecen en mí, y mis palabras permanecen en ustedes, pidan todo lo que quieran, y les será hecho.” ¡Qué promesa tan llamativa! Pero antes de pensar que Jesucristo se haya convertido en un genio en una botella, preparado a servir cualquier gusto y deseo nuestro, tenemos que acordarnos de la persona a quien promete Jesús que le hará todo lo que quiera: la persona en quien sus palabras permanecen. Es decir, por permanecer en las palabras de Jesús, nuestros deseos se convertirán a ser como los deseos de Jesús. Por permanecer en sus palabras, nuestras peticiones en oración serán más como las suyas. Mientras permanecemos en su palabra, el Padre, el Labrador sobre la vid verdadera, nos limpiará y hará que llevemos más fruto. Por permanecer en su palabra, nuestras peticiones no serán basadas en el mero cumplimiento de nuestros deseos – como dice Santiago 4:3: “Piden, y no reciben, porque piden mal, para gastar en sus deleites.” En cambio, por permanecer en las palabras de Jesús, nuestros deseos serán conformados a los suyos, y con gusto Jesús hará todo lo que pedimos, porque pedimos de acuerdo con su palabra. Por eso, examinamos su palabra regular y detalladamente, pidiendo que su Espíritu Santo las utilice para transformarnos, y pedimos en oración de acuerdo con sus palabras. Entonces hoy, entre nuestras peticiones, sería muy apropiado pedir que seamos atentos a los medios, los recursos, y el tiempo que el Señor nos ha dado para permanecer en la palabra. Sería apropiado pedir que seamos instrumentos para que otros en nuestros círculos de familiares y amistades tengan acceso a las palabras de Jesús y permanezcan en ellas. Podemos pedir que sea evidente nuestra permanencia en las palabras de Jesús por el buen fruto que se produce por eso.